sábado, 11 de julio de 2020

Especial: The Old Guard





Ser inmortal parece más una maldición que algo deseable, si no que se lo pregunten a los protas de The Old Guard. Ellos son Andy, Booker, Nicky y Joe, cuatro guerreros, los más letales y capaces del mundo, a los que se une una nueva recluta llamada Nile. Llevan toda la vida luchando incansablemente por el bien común en las sombras, o al menos así era hasta que un día les tienden una trampa. Este es el punto de partida del cómic homónimo, escrito por el aclamado guionista Greg Rucka y dibujado por el artista Leandro Fernández, cuyos derechos fueron adquiridos por Netflix con el próposito de llevarlo al cine. Sentía curiosidad por él y, aprovechando el estreno de la película, me animé a darle una oportunidad. He de decir francamente que lo disfruté por muchos motivos, dejándome con ganas de ver su adaptación. A continuación quisiera contaros mis impresiones generales tanto del cómic como su adaptación cinematográfica, quiénes están detrás de cada cosa, cuáles son sus puntos fuertes y débiles, etc. Empecemos por el principio.





Greg Rucka es de sobra conocido. Ganó notoriedad por su serie de novelas sobre el guardaespaldas Atticus Kodiak antes de debutar en el mundo del cómic en 1998 con Whiteout (el cual publicaría con Oni Press, para quienes también realizaría su secuela y Queen & Country que les valdrían sus primeros Eisners a principios de los 2000). Sus mejores y más aclamados trabajos los ha realizado en la saga Batman: tierra de nadie, luego en Detective Comics y en la serie Gotham Central junto a Ed Brubaker. Es considerado un "escritor de mujeres fuertes", entre las cuales destacan Wonder Woman, Renée Montoya y Forever Carlyle, la protagonista de Lazarus (cuyo primer volumen reseñé  hace tiempo en el blog).


Greg Rucka (guionista)
Leandro Fernández (dibujante)

Leandro Fernández, por su parte, es un dibujante argentino que lleva trabajando para el mercado americano desde los años 90. Ha hecho sus pinitos en Marvel, encargándose de dibujar a personajes como Hulk, el castigador o Lobezno. También ha trabajado para DC y con autores como Peter Milligan o el propio Rucka, con el que ya había trabajado en 2002 ilustrando el tercer volumen de "Queen & Country" antes de reunirse de nuevo en The Old Guard.



Una vez hechas las presentaciones, pasemos a hablar del cómic. El trabajo de Rucka al guión es excepcional. A lo largo de la historia (espero que tenga continuidad) el escritor va tejiendo un sugerente entramado logrando así mantener enganchado al cómic hasta terminar de leerlo. Los personajes están muy bien construidos, sin perder ese halo de misterio que los hace tan atractivos; esto no siempre lo encontramos en propuestas parecidas y es algo vital que personalmente aprecio mucho. También cabe destacar como Rucka los diferencia unos de otros mediante flashbacks ambientados en distintos momentos históricos que vivieron, como las Cruzadas o la invasión napoleónica de Rusia. De este modo sabemos más acerca de su pasado, las relaciones que tuvieron y otros muchos detalles los cuales sirven para encariñarse de ellos. En cuanto al dibujo, Fernández tiene un estilo parecido al de su compatriota Eduardo Risso pero hay algunas diferencias sutiles que lo diferencian. Si os digo la verdad al principio no terminaba de convencerme, sin embargo terminé acostumbrándome. Destaca sobretodo en lo referente a narrativa gráfica. El color, que corre a cargo de Daniela Miwa, juega también un papel fundamental y el acabado es muy satisfactorio en dicho apartado. En definitiva, acción, camaradería, buenos diálogos (no quería que se me pasara comentarlo) y un apartado gráfico espectacular es lo que vais a encontrar en esta recomendable serie de Image Comics. 


Theron en acción

Ahora pasemos a hablar de la película. Este año Netflix está viéndose beneficiada por la crisis del Coronavirus ya que apenas hay estrenos de cine potentes a los que hacer frente. Es por ello que a producciones suyas como Tyler Rake, The Last Days of American Crime o esta The Old Guard (curiosamente todas ellas basadas en cómics) les está yendo tan bien, convirtiéndose en la comidilla de no pocas conversaciones por el motivo que sea. De las que yo he visto esta es la que me ha dejado más satisfecho. Como adaptación me parece inmejorable, y eso que hay unos cuantos cambios (algunos para mejor) respecto al cómic pero por lo general se ha respetado la esencia del mismo. En cuanto a la dirección de Gina Prince-Bythewood, cuyo primer contacto con el mundo del cómic se produjo cuando dirigió un episodio de la serie inédita en España Capa y Puñal, no está nada mal; visto lo visto diría que tiene buena mano para la acción (hay escenas aisladas como la del piso franco que están resueltas de una manera estupenda). Otro gran acierto lo constituye la elección de Charlize Theron, nuestra querida Furiosa, para interpretar a su protagonista: ella es el principal reclamo de la película y solamente por verla luchar contra un ejército entero merece la pena echarle un vistazo. 



Sin embargo, aun habiendo pasado un rato buenísimo viéndola, hay aspectos negativos de The Old Guard que no se pueden dejar pasar por alto. Para empezar me falla mucho la selección musical; los temas escogidos no pegan con la mayoría de escenas ni con cola, hay momentos en los que incluso llegan a sacarme de la película. Luego está su villano, quien en ningún momento representa una seria amenaza para nuestros héroes, ya pasaba en el cómic y ahora en su adaptación. Quizás Rucka debería haber encontrado un punto medio entre ambas versiones del personaje o haber construido uno mejor desde el principio. Por otro lado, entre los cambios que comenté antes hay uno que personalmente me ha molestado bastante: apenas hay flashbacks, solamente uno y ni siquiera es la mitad de espectacular que los del comic (supongo que la mayoría del presupuesto se fue en contratar a Theron).

Igualmente, vista en perspectiva, The Old Guard me parece una buena película de acción y una adaptación todavía mejor de un cómic que si tenéis la oportunidad de leer os lo recomiendo mucho. Norma Editorial lo editó el año pasado en formato rústica por unos 19 euros, un precio a mi modo de ver razonable... ahí lo dejo.




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