- SINOPSIS: Un adolescente sin hogar es reclutado por una organización e internado en un colegio de élite en el que estudian los hijos de las familias más importantes y adineradas dentro del mundo del crimen. Mantener su propio código moral mientras aprende a sobrevivir en un ambiente hostil se convierte en su primer objetivo, como también luchar contra las incertidumbres propias de un muchacho de su edad.
Corregidme si me equivoco pero creo que hay algo catártico en eso de ver sangrar a la gente en el cine o la televisión. No es que nos gusten la sangre y las vísceras en nuestra vida cotidiana pero sí que, cuando vemos un enfrentamiento en la ficción, aplaudimos el realismo de un buen chorro de sangre a cámara que nos "empape" de la emoción del momento. Apoyada en ese sentimiento, en esa euforia de la katana rasgando la arteria del enemigo, es donde pone el pie para impulsarse Deadly Class, la nueva propuesta de Syfy (que trae HBO a España) basada en la obra homónima de Rick Remender y producida por los hermanos Russo (sí, sí, los responsables de Vengadores: Infinity War).
Aún no habiendo leído el cómic en el que esta ficción se basa, la verdad es que me ha gustado mucho. Podríamos definirla como una serie de instituto salvo por el hecho de que en King's Dominion lo que aprenden sus alumnos es el noble arte del crimen y el asesinato. En eso la serie me ha recordado mucho a Kingsman, con otro chaval que abandona las calles gracias a una organización secreta que quiere entrenarle, aunque aquí no hay tanto dinero para crear espectáculo, todo hay que decirlo. Igualmente sus creadores, entre los cuales se encuentra el director sevillano Paco Cabezas (Carne de Neón), se las apañan muy bien para ofrecer un buen entretenimiento, tratando al mismo tiempo de retratar lo mejor posible cómo era la desafectada y cínica juventud de los años 80 en América.
Benedict Wong (que ya colaboró con los Russo en Infinity War) es el rostro más conocido de un reparto que completan los jovenes Benjamin Wadsworth, Lana Condor, Maria Gabriela de Faria, Liam James, Michel Duval y Luke Tennie, entre otros. A mí los personajes que más me han gustado son los de Wadsworth, quien interpreta a Marcus de una manera bastante convincente, y Gabriela de Faria; María es posiblemente el personaje más carismático e interesante de la serie, una chica con algún tipo de enfermedad mental que también la convierte en alguien muy impredecible.
En caso de ponerle alguna pega, a veces pienso que la serie peca de creerse más guay de lo que realmente es. A ver, no me malinterpretéis: la serie mola y me lo he pasado bien con ella, de hecho espero que haya una segunda temporada porque tal y como acaba la primera creo que esta sería necesaria, pero igualmente tengo la impresión de que sus guionistas se creen los únicos capaces de escribir algo así y no, existen series que son mucho más irreverentes, por no decir salvajes, que esta (veáse Preacher, la cual también está basada en un cómic e incluso diría que está todavía más pasada de vueltas que esta).
Con todo, creo que merece la pena recomendar Deadly Class. Tiene buenos diálogos, personajes e ingredientes que la convierten en una propuesta tan entretenida como divertida. Ojalá SyFy se anime a renovarla.
LO MEJOR: El detalle de los Flashbacks animados.
LO PEOR: El piloto puede llegar a ser un poco pesado ya que, a diferencia de los demás episodios, este tiene una duración más extensa.
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