CRÍTICA: EL IMPERIO DE LAS SOMBRAS

1. Titulo original: Mil-Jeong (the Age of Shadows)
   
2. Año: 2016
3. Duración: 139 min
4. Pais: Corea del Sur
   
5. Director: Kim Jee-Woon
   
6. Guionista: Kim Jee-Woon
   
7. Música: Mowg
   
8. Fotografía: Kim Ji-Yong
   
9. Actores principales: Song Kang-Ho, Yoo Gong, Lee Byung-Hun, Han Ji-Ming, Park Hui-sun, Eom Tae-goo, Shingo Tsurumi.
10. Género: Drama, Intriga, espionaje, años 20
11. Web oficial: No tiene
12. Resumen de la película: Finales de los años 20, durante la ocupación japonesa de Corea. Un grupo de la resistencia intenta traer explosivos desde Shanghái para destruir la base nipona en Seúl, mientras que los japoneses intentan detenerlos. Un talentoso policía japonés nacido coreano, que había pertenecido al movimiento independiente, se ve en el dilema de elegir entre su deber y el apoyo a una causa mayor
13. Premios: Festival de Venecia: Sección Oficial (Fuera de Concurso) 

 

Corea del Sur nos ofreció el pasado año una temporada memorable. Cineastas como Park Chan-Wook, quien nos trajo La Doncella (una película de la que ya os hablaré), o Yeong Sang-Ho, el mismo que firmó la adrenalítica Train to Busan, se dieron cita en 2016 para demostrarnos que su país sabe hacer cine y del bueno. Otro director que no podía faltar a la cita era el incombustible Kim Jee-Woon, un señor que trás firmar algunos títulos que me vuelven loco, como Dos Hermanas, A Bittersweet Life, o la memorable Encontré al Diablo, ha logrado alcanzar con su nueva película, el imperio de las sombras, un grado de maestría innegable.

La acción se situa en un marco histórico bastante desconocido para el público occidental, pero de gran fama entre el público asiático (el período de la ocupación japonesa en Corea), y pese a que Jee-Woon lo sabe, ni corto ni perezoso nos introduce rapidamente en el submundo de la resistencia, un entorno en el que proliferan los espías, las traiciones, y la violencia. No os voy a engañar: la película aparenta ser el sueño húmedo de cualquier amante de la acción o el espionaje, y aunque es cierto que el film cuenta con algunos set-piéces de acción bastante memorables (cabe destacar una extensa secuencia central situada en un tren), es una cinta de tono pausado y que, esencialmente, sirve de excusa para que su director pueda indagar en los fantasmas del pasado que su propia nación se ve incapaz de olvidar.

Justamente Jee-Woon, que suele rodearse de buenos actores, consigue trabajar fantasticamente este asunto gracias a su dirección de actores. Song Kang-Ho, más conocido por sus papeles en Snowpiercer y Memories of Murder, ambas de Bong Joon-Ho, encarna a un policía que trabaja para los japoneses pese a sus orígenes coreanos, lo cual provoca un gran dilema moral que Kang-Ho logra plasmar de una forma realista y sin caer en detalles melodramaticos. Por otra parte, Gong Yoo (fue el protagonista de Train to Busan) y su personaje resultan bastante convincentes, es más, Yoo me ha gustado más en esta película que en la superproducción de zombies realizada por Sang-Ho. Destacaría también la presencia del polifacético Lee Byung-Hun, actor fetiche del director y visto en superproducciones como G.I. Joe o los 7 magníficos, como el enigmático líder de la resistencia, y Shingo Tsurumi, toda una eminencia en el país del sol naciente.

Por lo general, pocas quejas expondría sobre el imperio de las sombras, una magnífica producción histórica y un estilizado thriller bastante complejo moralmente, todo ello respaldado por las sólidas interpretaciones de Song Kang-Ho y Gong Yoo y el talento de su director, un Kim Jee-Woon en estado de gracia.

LO MEJOR: La dirección de Kim Jee-Woon y las interpretaciones, especialmente la de Song Kang-Ho

LO PEOR: Es pausada y a vecés bastante compleja, si desconectas aunque sea durante un segundo, estas perdido.

Puntuación: 8/10