lunes, 19 de febrero de 2018

VAMOS EN SERIE: ALTERED CARBON




  • SIPNOSIS: La trama se desarrolla en medio del siglo XXV, una época en la que las personas ya no mueren, técnicamente, sino que sus mentes y consciencias son transferidas de un cuerpo a otro.  

Altered Carbon era uno de los proyectos televisivos más esperados por mí de este 2018. Desde que ví uno de sus atractivos avances en youtube el año pasado no logré sacarmela de la cabeza, al menos hasta que se estrenó hace unas semanas y empecé a escuchar comentarios bastante dispares sobre ella. Pero yo amo la ciencia-ficción, así que decidí obviarlos y echarle un vistazo a su primera temporada. Trás hacerlo debo reconocer que me siento decepcionado.



Para empezar Altered Carbon tendría que haber sido mucho más ambiciosa de lo que realmente es. Digo esto porque en general me parece bastante superficial, tanto a nível narrativo como vísual. Su argumento, el cual gira entorno a una investigación procedimental marcada por un fuerte trasfondo existencialista, ya lo hemos visto mejor tratado en otras películas como Blade Runner o Ghost in the Shell, mientras que sus efectos vísuales tampoco logran destacar más allá de las características luces de neón y varios coches voladores hechos por ordenador. Si es cierto que tiene algunas escenas de acción y coreografías bastante inspiradas (todas ellas muy deudoras del modelo impuesto por la saga The Raid) pero ni siquiera eso logra solucionar otro de los grandes problemas de esta serie: su irregular ritmo; a vecés puede ser algo muy trepidante, como una montaña rusa de emociones, pero otras vecés se torna tán pesado que cuesta muchísimo digerir los capítulos.



Ahora hablemos de su reparto. Joel Kinnaman ha demostrado en otras ocasiones que es un interprete más que fiable (vease la recomendable Dinero Fácil o El niño 44), pero esta vez no ha terminado de convencerme. Peor parada sale su compañera, la mejicana Martha Higareda. El personaje de esta última es igual de insoportable que un dolor de muelas, salvo cuando le da por soltar tacos en mejicano (reconozco que eso si me hizo mucha gracia). El resto del cast pasa sin pena ni gloria, a excepción de James Purefoy y Chris Conner, para mí los mejores actores de todo el reparto (cabe destacar especialmente el papel de Conner, una IA un tanto psicópata que imita a  Edgar Allan Poe y que regenta un curioso establecimiento llamado El Cuervo).

En resumen, pocas cosas salvaría de Altered  Carbon salvo algunas escenas de acción y las carismáticas actuaciones de Purefoy y Conner. Le falta una mayor profundidad y un mejor desarrollo de personajes, por no hablar del ritmo y los efectos especiales. Todo esto se puede mejorar de cara a una segunda temporada, pero desgraciadamente el mal ya está hecho y no hay vuelta atrás.

LO MEJOR: Las actuaciones de Chris Conner y James Purefoy, además de ciertas coreografías que lucen muy bien en pantalla.

LO PEOR: Su argumento flojea bastante y el personaje de Martha Higareda es inaguantable.

Puntuación: 4/10 




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